Lola Andrés
Ballester
Lucas Bort EdoVicent Fuertes Chabrera
Juan Gimeno Álbar
Iker Girona Benito
Nerea Juan Mollar
Adrián Rico Benajes
Marc Sánchez Montiel
Laura Sorribes Villanueva
David Torres Miravete
UNA COMUNIÓN DE PRIMERA
No es lo mismo una
comunión de primera que la primera comunión. Ojalá todas las primeras
comuniones fuesen de primera.
El cardenal
emérito de Sevilla Carlos Amigo reflexionando ahora, en este tiempo de primeras
comuniones, dice:
“Una comunión de primera es aquella en la que el centro
sea Jesús que nos hace suyos para ser semejantes a él, en la que se realiza un
gozoso encuentro entre dos personas: Cristo y el comulgante; en la que Cristo
se pone a nuestro lado, se mete en nuestra vida para que podamos estar cerca de
la suya, en la que se sienta la presencia real de Cristo resucitado.
Una comunión de primera es aquella a la que se refiere Benedicto XVI
“Comer de este pan es comulgar, es entrar en comunión con
la persona del Señor vivo. Esta comunión, este acto de “comer” es realmente un
encuentro entre dos personas, es dejarse penetrar por la vida de Aquel que es
el Señor. Aquel que es mi Creador y Redentor.
La finalidad de esta comunión, de este comer, es la
ASIMILACIÓN DE MI VIDA A LA SUYA, mi transformación y configuración con Aquel
que es amor vivo.
Por esto esta comunión implica la adoración, implica la
voluntad de seguir a Cristo, de seguir a Aquel que va delante de nosotros”.
“El que come de ese pan, dice el cardenal emérito de
Sevilla, se llena de una vitalidad siempre nueva. Pero para gustar de este manjar, hace falta
tener sano el paladar del corazón.”
Por tanto, la
primera comunión es un encuentro con el Señor, un encuentro entre dos personas
el que comulga y el Señor, con la finalidad de ir identificándonos cada vez más
con las actitudes y comportamientos de aquel a quien comulgamos.
No perdamos nunca
de vista esta gran verdad y que nuestras comuniones sean espacios,
oportunidades para ir identificándonos con aquel que es el Señor, el enviado de
Dios, el Hijo de María.
Que la Virgen
María del Niño Perdido nos ayude a hacerlo realidad y de una manera especial
que no lo pierdan de vista los niños y niñas que van a hacer su primera
comunión