RECOMENDACIONES ANTE EL COLONAVIRUS
Se
nos indica que hemos de tener en cuenta las siguientes recomendaciones
1.
La distribución
de la Sagrada Comunión es preferible que se realice en la mano al tiempo que se pide a los sacerdotes y
ministros dela Comunión que antes y después dela Comunión se laven las manos.
2.
Es muy
aconsejable retirar el agua bendita de las pilas situadas en la entrada delos
templos.
3.
Por lo que
respeta al rito de la paz, se aconseja realizar otro gesto distinto al habitual
de abrazar o estrechar la manos a los que están más próximos
4.
En cuanto a las
muestras de devoción y afecto a las imágenes, tan propias de este tiempo de
cuaresma y en la próxima Semana Santa, se pide que sean sustituidas por otras
como la inclinación o la reverencia “echar un beso” o hacer la señal de la
Cruz, evitando el contacto físico con ellas y facilitando un a mayor rapidez que evite aglomeraciones.
Al
mismo tiempo se nos pide, cosa que haremos con frecuencia y con mucha devoción, que recemos al Señor y a la Virgen María para
que libren cuanto antes al mundo del contagio del coronavirus. Es esto lo que
toca ahora.
Sigamos
las instrucciones que se nos están dando de parte de las autoridades, con
motivo del coronavirus, para bien de todos.
UN TEXTO DE LA PALABRA DE DIOS SOBRE LA CARIDAD
De la carta a los romanos 12, 12 ss.
HE
AQUÍ UNOS CONSEJOS MUY CONCRETOS QUE SAN PABLO LES DA A LOS ROMANOS, SON VÁLIDOS
PARA NUESTROS TIEMPOS
“Que vuestro amor no sea una farsa;
detestad lo malo y abrazaos a lo bueno. Amaos de verdad unos a otros como hermanos y rivalizad en la mutua estima. No seáis perezosos para el esfuerzo; manteneos
fervientes en el espíritu y prontos para el servicio del Señor. Vivid alegres
por la esperanza, sed pacientes en la tribulación y perseverantes en la
oración. Compartid las necesidades de los creyentes, practicad la hospitalidad.
Bendecid a los que os persiguen; bendecid y no maldigáis. Alegraos con los que se alegran; llorad con
los que lloran. Vivid en armonía unos con otros y no seáis altivos, antes bien
poneos al nivel, de los sencillos. Y no seáis autosuficientes.
A nadie devolváis mal por mal, procurad hacer el bien ante todos los
hombres. Haced lo posible, en cuanto de
vosotros dependa, por vivir en
paz con todos. No os toméis la justicia por vuestra mano, queridos míos, sino
dejad que Dios castigue, pues dice la escritura: A mí me corresponde hacer
justicia, y daré su merecido a cada uno. Esto es lo que dice el Señor. Por
tanto si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, del deber.
Actuando así, harás que enrojezca la
vergüenza.
No
dejes vencer por el mal; antes bien vence al mal a fuera de bien”