La cuaresma



El año cristiano gira en torno a dos ejes: NAVIDAD Y PASCUA. El nacimiento de Jesús y su muerte y resurrección.
Antes de la Navidad tenemos el tiempo de Adviento y antes de la Pascua tenemos el tiempo de cuaresma.
Son unas semanas para disponernos a celebrar estos dos grandes acontecimientos: La Navidad y La Pascua.
Ahora vamos a comenzar la cuaresma, será el miércoles de esta semana, el miércoles de ceniza. Y lo hacemos con la imposición de la ceniza. Con este acto queremos decir  que hemos entrado en cuaresma. Con esta celebración la Iglesia nos invita a disponernos durante unas semanas para celebrar la Pascua del Señor, su muerte y Resurrección.
Desde muy antiguo los cristianos para prepararse a la celebración de la Pascua han practicado
1.     El ayuno y la abstinencia, privándose de algo para poder así después compartir con los algo con los necesitados, para ejercitarse  a tener dominio de si. (Hemos de ver de qué podemos privarnos para que Dios ocupe más espacio en nuestras vidas o para ser más atentos, solidarios con los demás o para que las personas ocupen un espacio más importante en nuestras vidas) 
2.     Limosna, caridad. El ideal es que de lo que nos privamos podamos compartir con los necesitados. Buen tiempo este para hacer las paces con alguna persona o una buena ocasión para olvidar viejas disputas, buen tiempo para dedicar más tiempo a los enfermos o a la gente que vie sola
3.     Oración. Dar un tiempo a Dios, hacer de nuestra vida un diálogo con el Señor. Escuchar la Palabra de Dios. Estar con Dios en la Iglesia o donde estemos. Rezar dándole gracias, pidiéndole perdón, tratando de mirar nuestro mundo con los ojos de Dios.
4.     Hay  también una práctica habitual en todas las iglesias durante el tiempo de cuaresma que consiste en la práctica del Viacrucis. Por medio de esta práctica religiosa recordamos el camino de Jesús hacia la muerte, su entrega total, sin reservas a Dios y a la humanidad y al mismo tiempo con ella tomamos conciencia de la maldad del ser humano que fue capaz de matar al Hijo de Dios. Al mismo tiempo que recordamos el camino de la pasión de Jesús podemos ver que en nosotros, en nuestro entorno o más lejos hoy hay muchas personas que están reproduciendo la pasión de Cristo: hay violencias, hay injusticias,  hay guerras, hay hambre etc.
5.     Tradicionalmente el tiempo de cuaresma era un tiempo bautismal. Era en Pascua cuando los catecúmenos se bautizaban y durante la cuaresma se preparaban para este gran acontecimiento, para el nacimiento a la vida de Dios
Y todas estas prácticas cristianas las realizamos para disponernos mejor a la celebración de la Pascua, de la muerte y resurrección del Señor. Sabiendo que la meta de la cuaresma es  la Pascua, la victoria sobre el pecado y la muerte. Así fue en Jesús y ese es también nuestro destino
No perdamos de vista que la meta es la vida, la Resurrección. Jesús fue el primero de todos, detrás de Él vamos nosotros, teniendo en cuanta que para llegar a la Vida, a la Resurrección Jesús pasó por la muerte. En nosotros sucede algo parecido. Hemos de morir a muchas cosas, a muchos comportamientos para poder participar de la Resurrección de Jesucristo.
Es bueno que cado uno de nosotros nos hagamos un pequeño plan de vida para ver lo que vamos a hacer a lo largo de la cuaresma, siendo consciente de que son muchos los cristianos que están, como nosotros, tratando de vivir la cuaresma según las orientaciones de la Iglesia.