Sopar de la fam

Desde hace años venimos haciendo la Cena del Hambre para tomar conciencia de ese gran problema que se da en nuestro mundo. Y al mismo tiempo para recaudar fondos para esa causa tan noble.
Ya hemos tenido dos reuniones para preparar dicha actividad.
Este año la Cena del Hambre tendrá lugar el viernes, día 22 de abril a las 21 h en el lugar de costumbre, en el Salón de la Cooperativa.
Como todos los años hay gente que van a empezar a vender las entradas para la Cena del Hambre.
Como ha sucedido todos los años habrá quienes comprarán las entradas y participarán en el acto y habrá otras personas que comprarán las entradas y por los motivos que sean no participarán personalmente en la Cena. Las formas de colaborar en esta acción solidaria son múltiples.
Pronto pasarán por el pueblo unas personas que irán dejando en los establecimientos la propaganda de esta actividad.
Es importante colaborar con esta acción solidaria por esta causa tan noble.
Este año vendrán a estar con nosotros y a dirigirnos unas palabras algunas personas responsables de esta la organización eclesial “MANOS UNIDAS.”
Años pasados ha habido en el pueblo mucha colaboración por esta causa, es de suponer que este año se volverá a repetir.
Con antelación muchas gracias a todas las personas que se están implicando en la organización de esa actividad y gracias también a todos los que, de una forma u otra, van a participa. Como decimos la unión hade la fuerza.
Este año el lema de la campaña es PLÁNTALE CARA AL HAMBRE: SIEMBRA.
  1. Sembrar recursos para que se pueda mejorar la vida de muchas personas.
  2. Sembrar capacidades para que los pequeños agricultores puedan desarrollar una agricultura respetuosa con el medio ambiente.
  3. Sembrar responsabilidad y cooperación entre los estados.
  4. Sembrar solidaridad.
Como decía Mary Salas, la primera presidente de Manos Unidas “El día en que los hombres decidan que no haya más hambre sobre la capa de la tierra, no la habrá. Supone una toma de conciencia semejante a la de la abolición de la esclavitud. Será un mundo nuevo”.

En ocasión de la resurrección de Jesús

 
Señor Jesús, me he dado cuenta de un detalle,
parece que nos gustas más en la cruz que en la resurrección
¿Será porque tenemos más experiencia de sufrimientos que de gozos y alegrías?
Nos sentimos más asociados a ti en el camino del calvario
que en tu victoria sobre la muerte.
¿Por qué será?


 No sé porque nos sentimos más atraídos
por el Crucificado que por el Resucitado.
Sé que eres el mismo, pero desde distinto ángulo.

 De ahí saco la conclusión que nuestra religión
a lo mejor tiene un tono de tristeza, más que de alegría,
tiene más aires de calvario que de sepulcros vacíos,
más tardes de "viernes Santo" que de "mañanas de Resurrección".
Y así se nos van los años con las miradas puestas en la cruz.
Nos quedamos en la Cruz y no llegamos al último paso
¡De la Cruz a la Luz! ¡De la Muerte a la Vida!

Por eso, a lo mejor, los cristianos tenmos tan poca cara de resucitados,
por eso nuestros cultos parecen más un lugar "para el pésame"
que el abrazo de la Pascua...

Da la impresión que nuestras liturgias son más para los muertos que para los vivos...
¿Acaso nos gusta más la muerte que la vida?


De verdad que me preocupa todo esto.
¿Qué estoy haciendo para que esto cambie?
¡Despiértame, Señor y Resucítame!
Alegrémonos, Cristo HA RESUCITADO.

Restauración de la imagen de la Virgen del Rosario

 


Vamos a restaurar la imagen de la Virgen del Rosario, que antiguamente salía en procesión en la fiesta de la Juventud y tenía todos los años unas clavariesas.
En vistas a esta restauración, algunas mujeres que fueron clavariesas, hace años, se han reunido para ver la manera de recordar aquel acto y tratar de colaborar en los gastos de dicha restauración. Ya lo irán anunciando.
Ellas a todos los que deseen colaborar en los gastos que va a suponer dicha restauración les hacen una propuesta que la verán concretada en una propaganda que han confeccionado y ue la pondrán en los establecimientos del pueblo.

¿Dónde buscar al que vive?



Un día a Dios se le ocurrió bajar al mundo a divertirse jugando con las personas al escondite. Como no estaba acostumbrado a esos juegos, consultó primero con los ángeles. ¿Dónde encontraría el mejor escondite para que los hombres no pudiesen dar con él?
Algunos le dijeron: “Lo mejor es que te escondas en el fondo del mar. Allí nadie te irá a buscar”.

Otros le aconsejaron que el mejor lugar sería el cementerio del pueblo. “Con el miedo que tiene la gente a los muertos, jamás se les va ocurrir buscarlo allí”.erás que allí nadie va a buscar”
Siempre es más fácil buscar lejos. ¿Será por eso que las grandes noticias también vienen siempre de lejos? Es que las de cerca parece que no tienen interés. Y por eso conocemos mejor a los de fuera que a los de dentro. Nos parecen más interesantes las noticias de lejos que las de cerca.

De pronto escuchó hablar de un gran sabio que había en la tierra. Y Dios se dijo a sí mismo: “Mejor le consulto al sabio porque debe conocer muy bien a los hombres”
Cuando Dios le consultó al sabio, éste muy sereno le respondió: “Si quieres que nadie te encuentre, escóndete en el corazón de los hombres. Y v

Tenía un compañero de estudios muy original. En aquel entonces era costumbre entre nosotros los estudiantes, a la noche, hacer una breve reflexión a los compañeros. Este buen compañero siempre comenzaba diciendo “Dice un filósofo chino…” “Dice un filósofo griego…”. Un día, le pregunté. “Oye, ¿Quién es ese filósofo chino a quien has citado? Con mucha malicia me respondió: “Yo”. Pero, si digo que soy yo ninguno de vosotros me creeríais; cuando lo digo en nombre de un filósofo, todos me creéis”.a

Y Dios no se revela desde lejos, sino que se revela acercándose siempre



l hombre.
¿Acaso la encarnación no significa la cercanía de Dios al hombre? Siempre nos lo imaginamos en el cielo, cuando, en realidad, Dios vive además mucho más en la tierra, donde tiene los tesoros de su corazón que somos las personas. Cuando queremos vernos con Dios, lo primero que pensamos es. “Tengo que ir a la Iglesia”
Y es cierto en la Iglesia está Dios. Pero además ¿a cuántos  se les ocurre visitar a Dios en su propio corazón o en los pobre y en los que sufren?
¿A quién se le ocurre pensar que además de estar en la Iglesia, en el sagrario Dios está también en el propio corazón, en el corazón de todas las personas, en especial en el corazón de los pobres?
Este fue el problema de María Magdalena y de los discípulos.
Lo buscaban entre los muertos y él estaba jugando con las flores del jardín.
Lo buscaban entre los muertos y él estaba divirtiéndose con los vivos.
Lo buscaban en el sepulcro y él estaba en sus corazones.
Para encontrar a Jesús no hay que ir lejos.